Caminando buscando tu mano, no encuentro algo y menos tu piel, el viento se rie gritando, me despeina y me hace caer.
Y es que aun no te supero, el oirte da miedo, y ni hablar el verte de pie, aun que lo que me da energía son esos abrazos que solía tener...
La hora no pasa y me cuesta acostarme en mi cama solo otra vez, desde que no estás las sabanas son clavos, y las plumas restos de la botella del vino de ayer. Por las noches yo sueño despierto con esa promesa de uno de esos dias de ayer: "que siempre estarías a mi lado", desde que te fuiste no te he vuelto a ver.
Y es cuando viene el llanto y con él trae al regaño, los por qué, las drogas, el vino, el tabaco y asi todos ellos se vuelven aliados, me relajan y me acurrucan para hacerme dormir...

De Abajo

Te exhalo, te inhalo, sigues regresando a decirme "eres el que podría haber sido".
En mis ojos lo veo oh tan claro, fue hace mucho y muy lejos pero nunca desaparese.
Trato de dejarlo en el pasado, sostenerme de mí mismo y no mirar atrás...
Así que déjame ir, déjame volar, déjame sentir el espacio entre nosotros hacerse más grande y más oscuro cada día.
Mírame ahora porque seré una persona nueva, mi corazón no estará roto; se abrirá a todos menos a ti. Aun cuando cruce la linea es como una mentira que he dicho miles de veces...
Y una parte de mí aún cree cuando decías que te quedarías, y parte de mí aún cree cuando encontrabas una forma de "solucionarlo", pero sé que intentamos todo lo que pudimos así que sólo digamos adiós para siempre
No quiero soñar en todas las cosas que nunca fueron, quiza pueda vivir sin ellas
cuando me levanto de abajo. No quiero sentir el dolor ¿qué bien me haría eso ahora? lo sabré todo cuando salga de abajo...

Cuántos cuentos cuento


Los años que pasan me pesan, me pisan el alma y la pone a tus pies. Si al besarme me diste la vida, al marchar te llevaste mi ser.
Yo pasé tanto tiempo intentando fingir ser más tonto olvidando el ayer, que el amor de mi vida es un pacto: "él me quiere y yo le trato bien".
Pero a veces me descubre ordenando veinte veces los libros, las copas, las cartas, la alcoba y sospecha con miedo que está en esta estrofa... y Dios sabe cuántos cuentos cuento por disimular.
Si bendije el día en que tú llegaste hoy me gasto la boca en pedirme perdón por las veces que intento besarte mientras beso a quien es hoy mi amor.
Y es que malditos seáis los fantasmas, juguéis con ventaja, doléis de verdad. Aun que luego os vistáis de mentira y por eso no os pueda atrapar.
Pero aveces si no mira nadie, cerrando los ojos lanzo un beso al aire, y luego suspiro y despacio imagino que allí donde quiera que estás amor mío, aterriza en tus labios y piensas un poco en mí.
Y es que si yo te recuerdo me paso las horas cantando. Mi vida sucede y los días le ceden el paso a la voz castigada sin voto desde hace ya años de mi corazón cansado de gritar.
Y es que a veces no puedo evitar que se escapen volando mis mil mariposas que sueñan contigo a diario. Mi indulgencia les abre la celda y te besan llorando si prometen que en segundos volverán a la realaidad...